¿Eres un amante de las mariposas y te gustaría atraerlas a tu jardín? Las mariposas son sinónimo de belleza y color, y su presencia puede dar vida a cualquier espacio verde. Pero no todas las flores atraen a las mariposas. Estos bellos insectos son selectivos con las flores que visitan y se sienten atraídos por ciertas especies más que por otras.
A continuación, te presentamos una lista de seis flores esenciales para atraer mariposas a tu jardín.
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Buddleia (Buddleia davidii): También conocida como la planta de mariposa, es una de las mejores flores para atraer mariposas. Sus largos racimos de flores, que varían en color desde el rosa y morado hasta el blanco, son ricos en néctar, lo que los hace irresistibles para las mariposas.
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Equinácea (Echinacea purpurea): Esta flor, con sus grandes cabezas florales de color rosa o morado, es otra favorita de las mariposas. Además, la equinácea es resistente y fácil de cultivar, lo que la convierte en una excelente opción para cualquier jardín de mariposas.
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Verbena bonariensis: A las mariposas les encantan estas delicadas flores de color púrpura. La verbena bonariensis es una planta perenne que produce flores durante todo el verano y hasta el otoño, proporcionando un suministro constante de néctar para las mariposas.
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Sedum (Sedum spectabile): Esta robusta planta suculenta produce flores rosadas o rojas en el verano tardío y el otoño. Las mariposas, particularmente la monarca, adoran estas flores.
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Salvia (Salvia officinalis): La salvia no solo es una hierba culinaria, sino también una excelente planta para mariposas. Sus flores azules o moradas atraen a una variedad de mariposas, incluyendo la mariposa esfinge y la mariposa cola de golondrina.
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Aster (Aster novi-belgii): Los asters son una fuente tardía de néctar para las mariposas. Sus flores de color púrpura, rosa o blanco son particularmente atractivas para la mariposa almirante rojo y la mariposa tortoiseshell.
Crear un jardín de mariposas no solo es una forma maravillosa de disfrutar de la jardinería y embellecer tu espacio al aire libre, sino que también contribuye a la conservación de estas bellas criaturas. Las mariposas, como muchos insectos polinizadores, están en declive debido a la pérdida de hábitats y a la utilización de pesticidas. Al proporcionarles un hábitat y una fuente de alimento en tu jardín, estás ayudando a su supervivencia.
Recuerda que, además de las flores, las mariposas necesitan sol y agua para sobrevivir. Por lo tanto, asegúrate de incluir un área soleada y una fuente de agua (como un plato poco profundo con piedras y agua) en tu jardín de mariposas. Y por supuesto, evita el uso de pesticidas que puedan dañar a las mariposas y otros insectos beneficiosos. Con las flores adecuadas y un poco de cuidado, pronto tendrás tu propio paraíso de mariposas en tu jardín.
